EL CASO DEL MALTRATO DEL PACIENTE ANCIANO

Podemos darnos cuenta que en el principio de justicia,  uno debe de tratar a las personas con equidad cosa que no hacen con los ancianos. En  el principio de autonomía,  se dice que toda persona es capaz de tomar decisiones pero muchos doctores o enfermeras no hacen eso con los ancianos. 

 

En el caso de Carmen es ya una persona adulta, en la cual uno de sus errores como paciente es al no seguir las indicaciones del médico. Las faltas del médico es al dejar de dar un seguimiento de la enfermedad de Carmen, es decir, al principio el médico fue bueno al tratar de apoyar a su paciente en una mejoría de su salud sin embargo incurre en un delito culposo llamado negligencia que es el abandono a su paciente lo que le produce daño. 

Como secreto profesional el médico hizo bien al respetar la voluntad de la paciente Carmen, pero en sí, Carmen se preocupaba mas por su nieto, que por su propia salud. Lo cual el médico debía buscar una manera correcta para orientarla, y buscar una mejor integridad hacia el paciente. 

Considerar que un anciano, no puede tomar determinadas decisiones en el ámbito de su salud es claramente inmoral y vulnerable a sus derechos más elementales. El anciano enfermo, mientras no se demuestre lo contrario, es una persona autónoma.